sábado, 31 de julio de 2010

¡Vamo arriba la Celeste!

















Bueno, como Argentina perdió y es importante estar con los ganadores, decidí alentar a nuestro país hermano: ¡Uruguay! ¡Hasta me pagaron un pasaje para viajar a Sudáfrica! ¡Waka waka!
Acá pueden verme alentando la gloriosa camiseta celeste:



domingo, 27 de junio de 2010

¡Vamos vamos, Argentina!

Para este Mundial, decidí reciclar los viejos posters que usamos en el Mundial 2006... Total, ¿quién se va a dar cuenta? Eso sí, ¡espero que este sábado terminemos mejor que en el Mundial pasado...!

¡Argentina! ¡Argentina!

martes, 25 de mayo de 2010

El pato del Bicentenario

Estuve poniéndome a tono con los festejos patrios. Acá hay algunas fotos de mi festejo, con dos de nuestros símbolos nacionales: la escarapela y el mate.

lunes, 24 de mayo de 2010

Aventuras chilenas

En las vacaciones de verano estuve paseando un poco por Argentina, y fui a visitar a mi amigo tucumano, Miguel...

Cómodamente instalado en el auto, camino al norte.

Una parada por la famosa ruta 40...

¡MIGUEL! Mi amigo tucumano. Cuántos hermosos recuerdos...

Pero después me cansé de él, y él se cansó de mí, así que decidí mandar a la mierda a la Argentina e ir a Chile. ¡Acá hay algunas fotos de la increíble aventura...!



Decidí cruzar por Catamarca, por el Paso de San Francisco. Lo que no sabía es que el lado chileno está hecho pelota! Hermanos chilenos, ¡poneí media pila, weones!

Visitando amigos en el lago de Cortaderas.

Una parada por mi caleta... ¡qué feo día nos tocó!

Camino a mi destilería petroquímica. Después tuvimos que volver por donde vinimos.

Estos chilenos son medio raros. Además de que todo es carísimo, le dicen "choripán" a un pancho con una salchicha toda gruesa, y encima la toman con té o café. ¡Qué asquerosos!

Además, parece que les gusta insultar a la gente con la cartelería

Y a que no saben quién es la cara del famoso Banco Estado de Chile... ¡Sí, soy yo! Caracterizado de futbolista y de Einstein para la propaganda...

Mantengan la calma


La verdad, no me imaginaba pasar así el Bicentenario...